A MI MADRE
Me gustaría decirte un millón de cosas, pero nunca he sabido muy bien cómo empezar.
Decir que soy parte de ti es quedarme corta pues no solo me diste la vida, sino que también me distes los mejores consejos, los abrazos más tiernos y la fortaleza necesaria para ser la persona que soy ahora.
Sé que he perdido muchas oportunidades de decir te quiero, pero hoy me he propuesto hacerte saber lo valiosa que eres para mí.
Porque te llevo en el corazón como tú me llevas en el tuyo.
Porque quiero darte todo lo que te mereces como tú me distes tu entrega.
Porque el amor no debe esconderse y más si es entre madre e hija.
Por todo esto y por mucho más que guardaré siempre conmigo, quiero ofrecerte mil te quiero por cada vez que me los callé.
Perdóname por mis silencios cuando debía hablar, por los besos que no te di cuando estaba enfadada, y por las sonrisas que me guardé cuando no quise compartirlas contigo.
Perdona por no dejar que compartiéramos nuestras lágrimas, por querer hacerlo todo sola y por haberme soltado de tu mano cuando ya creía que no te necesitaba.
Te quiero, por ser la persona que eres, y por querer hacer de tu mundo un lugar donde siempre pueda entrar yo.
Puede que nunca sea madre, pero siempre estaré orgullosa de ser tu hija.
P. D:
Os deseo un feliz día a todas las que alguna vez habéis amado con el corazón de una madre.
